Noticia diario SUR campo de glof

Después de que los empresarios locales y el Ayuntamiento de Nerja volvieran a alzar la voz exigiendo a la Junta de Andalucía que se replantee su postura inflexible en relación al proyecto del campo de golf, paralizado tras la entrada en vigor del Plan de Ordenación del Territorio de la Axarquía (POTAX), en el año 2006, el delegado de la Administración regional en la provincia, José Luis Ruiz Espejo, se comprometió ayer, en declaraciones a este periódico con motivo de una visita institucional al Consistorio de Torrox, a trasladar este asunto a la Consejería de Medio Ambiente y de Ordenación del Territorio en Sevilla, para buscar posibles vías de solución.

No obstante, el máximo responsable de la Junta de Andalucía en la provincia reconoció que no está en la agenda del Ejecutivo regional bipartito (de PSOE e IU) el llevar a cabo modificaciones sustanciales de normativas urbanísticas aprobadas en los últimos años, pues esta posibilidad «podría conllevar una gran inseguridad jurídica», apostilló Ruiz Espejo, quien también aludió a que este tipo de asuntos «generan el rechazo de los colectivos ecologistas y de protección del medio ambiente».

En todo caso, el representante de la Junta en la provincia reconoció a SUR que no tiene «demasiada información precisa» sobre los antecedentes históricos del frustrado proyecto del campo de golf previsto en el Barranco de la Coladilla. «Me comprometo a sentarme con el alcalde de Nerja y a estudiar las posibles vías de solución», insistió Ruiz Espejo.

En todo caso, y tras mantener una conversación con este periódico, el delegado de la Junta también hizo alusión a que los planeamientos urbanísticos regionales «están siempre por encima y tienen prevalencia jurídica y legal sobre los planeamientos locales». No en vano, en el caso del campo de golf de Nerja, el PGOU de 2000, que contó con el visto bueno de la Junta, sí contempló este proyecto, y posteriormente, la venta de los terrenos por 15 millones de euros a la multinacional Medgroup, obtuvo el visto bueno de la Junta.

Sin embargo, tres años después, en julio de 2006, el POTAX invalidó el proyecto. La empresa recurrió en 2007 a los tribunales, pero en una primera sentencia de 2011 no se admitió la demanda para que el Consistorio le devolviera los 15 millones de euros. La firma Medgroup tiene recurrido este primer fallo judicial.